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Yanomami na Imprensa
Data: 11 - Outubro - 2006
Titulo: Garimpeiros ameaçam Ye´kwana e Sanema (Yanomami) no Rio Caura – Venezuela
Fonte:
Nalúa Rosa Silva Monterrey (UNEG-CIAG)
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Garimpeiros ameaçam
Ye´kwana e Sanema (Yanomami) no Río Caura – Venezuela
Por: Nalúa
Rosa Silva Monterrey (UNEG-CIAG)
Coromoto Núñez (Ye'kwana de la Organización Kuyujani)
Ciudad Bolívar
25 de Septiembre de 2006.
El día
22 de agosto los Ye'kwana y los Sanema [Yanomami do norte] reunidos en Asamblea
levantaron un acta rechazando la minería en el Caura toda vez que algunos
Ye'kwana y Sanema habían empezado a incursionar en dicha actividad.
A estas personas se les llamó y obligó a abandonar la mina.
Lamentablemente la existencia de la mina llegó a oídos de los
mineros criollos quienes empezaron a subir el río Caura desde la población
criolla de Maripa.
Para el día 14 de Septiembre los representantes de la organización
indígena Ye'kwana y Sanema "Kuyujani" ya habían puesto
la denuncia de la presencia minera en las diferentes instancias oficiales:
Guardia Nacional, la Armada, Teatro de Operaciones No. 5, Ministerio del Ambiente
y Fiscalía Ambiental.
Los mineros empezaron a llegar en oleadas desde el Caroní y Paragua,
aliándose luego con los pobladores de Guarataro (población de
agricultores migrantes provenientes de los llanos venezolanos y de Colombia)
a esta población se incorporaron posteriormente habitantes criollos
de Maripa, Trincheras, Majadas y Tigrera todas, poblaciones no indígenas
del bajo Caura. Llegaron además indígenas pemón desde
el Paragua y mineros brasileros y guyaneses con máquinas, embarcaciones
y motores.
Compradores de oro del Manteco (población bastante distante en la ruta
hacia Tumeremo) se instalaron en Maripa y aparentemente también compraban
oro personas de Maripa.
Para llegar a Maripa por tierra desde el Caroní hay que pasar varias
alcabalas y en ninguna se hizo nada por detener a los mineros.
Para el día jueves 21 se calculaba que había en la cuenca del
Caura alrededor de mil mineros provenientes de diferentes sitios.
Los Ye'kwana y los Sanema por su parte empezaron a bajar de las comunidades
del alto Caura para impedir la entrada de mineros apostándose en el
Salto Para que es un lugar de paso obligado entre el bajo Caura y el alto
Caura (la mina se encuentra arriba del Salto Para en el medio Caura). En el
Salto Para los indígenas empezaron a tratar de disuadir a los mineros
de no subir además de no prestarle colaboración.
Lamentablemente
los indígenas no pudieron detener a los mineros pues los mineros llegaban
con sus propias embarcaciones, con motores y además con armas.
El día viernes 21 de Septiembre de 2006 se inició la operación
militar por parte del Teatro de Operaciones No. 5 para desalojar a los mineros,
llegando desde Maripa, esta actividad fue coordinada con líderes ye'kwana.
Se acordó desalojar a todas las personas que estuvieran haciendo la mina
sin excepción y si se encontraban indígenas aunque fueran de la
zona se desalojarían también.
Los militares iniciaron su operación de desalojo. Hasta donde sabemos
la operación fue pacífica aunque se tiene conocimiento de que
se obligó a las personas a desvestirse encontrándose que una mujer
por ejemplo llevaba oro en sus partes intimas y un hombre en sus medias. Este
oro fue decomisado.
El viernes en la tarde, uno de los líderes Ye'kwana el Sr. Asrúbal
Sarmiento, estaba en el Puerto de Maripa y en ese momento llegaron los mineros
que venían bajando. Los militares también estaban en el puerto
e iban a revisar a los mineros, estos enardecidos empezaron a insultar a Asdrúbal
por considerarlo responsable del desalojo, un minero se acercó y le golpeó,
pero Asdrúbal obtuvo la protección de los militares y de allí
los guardias tuvieron que sacarlo del pueblo.
Los Ye'kwana y Sanema organizaron una asamblea el día sábado 22
de septiembre en el Salto Para. Allí se levantó un acta con los
mineros que se encontraban en el lugar y se acordó que estos bajarían
hacia Maripa.
Algunos de los mineros que desde el viernes fueron desalojados de las minas,
se fueron concentrando en el pueblo de Maripa aunque otros fueron tomando rumbo
de regreso hacia la Paragua.
A la par, familiares de los mineros empezaron a llegar desde diferentes partes
del Estado Bolívar desde por ejemplo el km. 88. Todas estas personas
se empezaron a concentrar en Maripa.
Allí tomaron la carretera, y la cerraron (esta carretera une Maripa con
Caicara y Ciudad Bolívar) empezaron a quemar cauchos y a amenazar a los
indígenas
En este punto, ya en el puerto de Maripa apareció un cartel con los nombres
de los líderes Ye'kwana señalando que "queremos la cabeza
de Asdrúbal Sarmiento, José Domínguez, Wanyú Torres,
Gaetano Pérez, Alberto Rodríguez, Ramón Tomedes y Cornelio
García".
El Sr. Alberto Rodríguez (coordinador encargado de la Organización
Kuyujani" al descender de la reunión del Salto tuvo conocimiento
de que en Maripa los mineros lo estaban esperando para lincharlo por lo cual
tuvo que regresar por otro lugar.
En Maripa los mineros empezaron a amenazar a los indígenas conjuntamente
con los familiares que iban llegando de todas partes y se fue incrementando
el consumo de alcohol.
Los indígenas escucharon a los mineros planificar que iban a capturar
a los líderes Ye'kwana ya identificados o a sus familiares. Lamentablemente
los Ye'kwana no pueden identificar a los líderes mineros, los cuáles
son como diez, puesto que son personas extranjeras a la zona.
El domingo 23 en la mañana los mineros amanecieron bebiendo con sus familiares,
quemando cauchos y empezaron a preguntar en el pueblo por los familiares de
los líderes Ye'kwana acusándolos de ser responsables del desalojo
de los mineros y de un supuesto maltrato sufrido por parte del ejército.
Dijeron que no abrirían la vía hasta que bajaran todos los mineros
que estaban en la mina sanos y salvos.
Los guardias de la alcabala, supuestamente abandonaron la alcabala pues cerca
de allí se estaban quemando los cauchos.
Las amenazas hacia los indígenas que tienen casas en Maripa fueron subiendo
de tono durante el día, al punto que los indígenas no podían
salir de las casas por temor a las amenazas persistentes de los mineros.
Hacia el mediodía los mineros quemaron la casa comunitaria de la gente
de Adawaña, luego saquearon y quemaron la casa de habitación del
alcalde de Sucre y un carro de la alcaldía de Sucre. Luego quemaron la
casa comunal del pueblo de Anadiquenña, luego saquearon la casa del líder
Ye'kwana Wanyú Torres, saquearon y se llevaron la radio de la casa del
líder Ye'kwana Cornelio García, además quemaron la casa
del enfermero Sanema Shimai. Los mineros quemaron además la casa del
Comando de la Guardia.
En este
momento se encuentran desaparecidas dos hijas del líder Ye'kwana Cornelio
García y un hijo de un maestro ye'kwana el Sr.Jacinto Pacheco. Se tienen
noticias que apuntan además del secuestro del hijo del cacique general
de los Ye'kwana Sr. Gaetano Pérez, quien vive en Cedeño. Con respecto
a todas estas personas indígenas cuyos paraderos se desconocen , los
ye'kwana temen lo peor.
Dada esta situación, los indígenas aterrorizados con la ayuda
de algunos vecinos de Maripa, especialmente las mujeres y los niños empezaron
a huir de Maripa.
Se sabe además que el Sr. Félix Daza, quien es un técnico
criollo que promueve la conservación de la cuenca del Caura, también
fue amenazado de muerte por los mineros por lo cual él y su familia al
igual que las familias indígenas tuvo que salir de Maripa.
Hacia las seis de la tarde de ayer, los Ye'kwana recibieron la información
de que los mineros habían salido en seis camiones hacia Ciudad Bolívar
para quemar la casa comunal de que los Ye'kwana y los Sanema tienen en Ciudad
Bolívar en el Barrio Hueco Lindo. Por esta razón, los Ye'kwana
y los Sanema empezaron a sacar de allí a las mujeres y los niños
y ubicar en casas de amistades de Ciudad Bolívar a los refugiados que
estaban llegando desde el Caura.
Los indígenas acudieron a todas las instituciones pertinentes ayer domingo
en la tarde y afortunadamente los mineros no se presentaron durante la noche.
Ayer en la noche, se recibió además la noticia de que una curiara
que venía bajando de la mina, con cuatro mineros se trambucó y
hasta ahora los mineros no aparecen por lo que los indígenas suponen
que se ahogaron.
La situación continúa difícil pero los Ye'kwana y los Sanema
mayoritariamente rechazan la presencia minera y están firme en la defensa
del ambiente y de sus hábitats con el apoyo de las autoridades.
Antes de finalizar queremos resaltar que las poblaciones de Maripa, Guarataro,
Tigrera, no son poblaciones tradicionalmente mineras. No se sabe a qué
intereses están respondiendo y sobre todo justo en el momento actual
en el cual, los títulos de propiedad de la tierra sobre los hábitats
que los Ye'kwna y Sanema ocupan en el Caura están a punto de serles otorgados.
Pareciera que existen personas interesadas en que este proceso de reconocimiento,
en el cual se ha trabajado desde hace casi nueve años de por parte de
las comunidades locales, no se dé. Así mismo llama la atención
el que esto se dé también en el momento en que se está
culminando el proceso de ordenamiento d el cuenca del río Caura región
en la cual como se sabe recaen cinco figuras de protección del ambiente
la cual es única en el mundo por su alta riqueza cultural, de biodiversidad,
boscosa e hídrica siendo la última cuenca virgen del mundo tropical.
Esperamos el apoyo de todos para solucionar esta situación, se le de
protección a los indígenas localmente, se entreguen los títulos
de la tierra a los indígenas, se ayude a generar alternativas de desarrollo
sostenible para las poblaciones del bajo Caura y se proteja la cuenca del Caura
para Venezuela y el mundo.
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Coordenação Editorial: Bruce
Albert (Assessor Antropológico CCPY) e Luis Fernando Pereira (Jornalista
CCPY)
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